Uno de los mayores problemas a los que se puede enfrentar una cocina es que se produzca una contaminación cruzada. Esto puede ocurrir al manipular los alimentos durante su preparación, ya que los microorganismos que producir intoxicaciones alimentarias, se transfieren a través de las manos, los equipos de cocina, los utensilios y las tablas para cortar. El problema también puede ocurrir por una incorrecta conservación de los alimentos. En este artículo vamos a darte las ideas fundamentales para evitarla.

Especial atención merecen las personas dentro de los denominados grupos de riesgo alimentario por alergias e intolerancias alimentarias. Las medidas a tomar deben ser muy estrictas haciéndose indispensable identificar correctamente el producto así como guardarlo herméticamente protegiéndolo de alérgernos alimentarios.

La premisa de la que partimos, es el aspecto más importante y no es otro que la higiene: lavarse las manos antes de cocinar y después de manipular alimentos frescos es básico.

En las cocinas las fuentes por las que un alimento puede ser contaminado pueden ser muy variadas. Además de la contaminación directa que se produce cuando un alimento limpio entra en contacto con otro contaminado (normalmente alimentos crudos),  la más común es la contaminación indirecta a través de las herramientas de trabajo: los cuchillos, las tablas de corte e incluso las propias manos de quién manipula el género. Para ayudarte a evitar este problema, en Disserra ponemos a tu disposición productos especialmente pensados para evitar la contaminación cruzada y de ahí que los herméticos y tablas de cortes estén identificados gracias a los colorclips y esquinas de colores respectivamente.

Otra recomendación fundamental es no utilizar el mismo recipiente para preparar alimentos crudos y cocinados. Si se va a utilizar herramientas como cuchillos, tablas de corte sobre alimentos cocinados tras ser utilizados sobre alimentos crudos, es conveniente limpiarlos con agua caliente y jabón. Por ejemplo no se debe cortar una lechuga en una tabla de corte si previamente se ha hecho lo mismo con carne de pollo.

La gestión de los alimentos durante su conservación es otro aspecto de especial consideración. En las cámaras frigoríficas siempre se deben conservar los alimentos cocinados en recipientes herméticos y situarlos en las estanterías superiores. De lo contrario podría ocurrir que los alimentos frescos, fundamentalmente carnes y pescados, goteen y se contaminen alimentos preparados ya para su consumo.

Te resumimos en forma de tips los aspectos fundamentales de esta materia:

• Utiliza recipientes herméticos para conservar los alimentos.
• Separa siempre los alimentos cocidos o listos para consumir de los que aún están crudos.
• Al guardarlos en el frigorífico, es mejor colocar los productos crudos en la parte inferior, y evitar así que puedan gotear y contaminar a los ya preparados.
• Lava la tabla con agua y jabón antes de cortar vegetales (sobre todo tras haber cortado carne)
• Lava igualmente los cuchillos y otros utensilios tras ser usados en alimentos crudos.
• Y lo más importante: no olvides lavarte muy bien las manos antes de cocinar, después de haber manipulado alimentos crudos o si has tocado otras superficies.

Evitar la contaminación cruzada en nuestra cocina profesional está en nuestras manos; puede parecer que implantar ciertos procedimientos es más trabajo del que en realidad es y además. nuestros clientes y el prestigio de local y nuestras ventas, lo recompensarán. En Disserra podemos recomendarte los envases herméticos, utensilios de cocina y productos de higiene y desinfección más adecuados para tu caso. Puedes también conocerlos AQUÍ.

Los contenedores evitan el deterioro de los alimentos y protegiéndolos de la contaminación cruzada. Permiten optimizar el espacio de almacenamiento y conservación de los alimentos. Con su utilización, las cocinas y obradores logran un doble objetivo: asegurar una calidad higiénico sanitaria óptima y reducir el nivel de mermas por deterioro de los alimentos.

Son la herramienta perfecta para un óptimo almacenamiento y conservación de los alimentos en diferentes condiciones de temperatura con la máxima higiene y seguridad alimentaria:

• Alimentos sin necesidad de refrigeración (máx. 27ºC).
• Conservación en frío ( 6 ºC / 8 ºC)
• Congelación (- 18ºC).

Los “ingredient bins” son ideales para el almacenamiento en seco, economato o despensa, para los alimentos secos, no perecederos o a granel, sin necesidad de refrigeración y en unas condiciones de temperatura y humedad adecuadas. Según el sistema APPCC (Análisis de Peligros y Puntos de Control Crítico) se recomienda una temperatura máxima de 27ºC.

Los contenedores de 80 y 100 litros, están fabricados en Polietileno de alta densidad, proporcionando la máxima rigidez y estabilidad al producto. Son perfectos para la conservación de productos a granel tales como harina, azúcar o legumbres. Proporcionan la máxima accesibilidad ya que la anchura de su ventana facilita la carga y descarga de la materia prima. Y gracias a su ventana transparente se consigue una rápida identificación del contenido. Al mismo tiempo se consigue una optimización del espacio del producto en uso ya que pueden ir ubicado bajo la mesa de trabajo.

Poseen unas ruedas incorporadas en la base, muy resistentes, que facilitan su movilidad. Además, un clip garantiza el correcto cierre del contenedor y permite extraer la tapa facilitando su limpieza. Gracias a su etiqueta de trazabilidad, cumple con las normativas y directrices marcadas por el APPCC que se recomienda transferir los alimentos empaquetados a recipientes de almacenamiento de plástico, vidrio o cristal.

El contenedor accesible de 50 litros fabricado en polipropileno aporta transparencia para ver con más facilidad su interior. Cuenta con el sistema de control de existencias F.I.F.O. (“lo primero que entra, es lo primero que sale”), recomendado por el estándar internacional de seguridad alimentaria APPCC. Está diseñado con tapa de carga y descarga para un mayor control de las existencias de forma que el primer alimento conservado es el primero consumido. Así se disminuyen las mermas en las materias primas.

Permiten una fácil accesibilidad ya que se puede acceder al contenido de cualquiera de los contenedores apilados sin necesitad de desapilar. La tapa se queda elevada en posición de apertura sin necesidad de sujetarla.

Puedes encontrarlos todos AQUÍ y recuerda que estamos siempre a tu disposición para cualquier consulta que necesites en el 974 471 480 o en disserra@disserra.com.